Una carta para "El indicado"

Hola cielo, antes de empezar con todo lo que quiero decir, primero, ¿cómo estás?, sé que responderás, bien o excelente, feliz o magnifico ¿y sabes?, me da muchísimo gusto porque siempre trato y tratare de que sea así.

Hoy puedo decir que Dios te trajo a mí, que ha cumplido la promesa que le hizo a mi mamá, que fuiste completa y totalmente diseñado para complementarme de esa hermosa forma con que lo haces.

Con tan solo el hecho de aguantar todos mis dramas y berrinches te has convertido para mí en un hombre súper extraordinario y por eso te amo demasiado.

No eres lo que esperaba, eres mucho más.

¿Sabes? Antes podría haber dicho que tardaste mucho en aparecer en mi vida, mas sin embargo ahora no pienso eso; llegaste en el mejor momento, en el perfecto.

Cuando te conocí nunca pasó por mi cabeza que eras tú el indicado, vaya que me sorprendiste.

Te fui conociendo y cada vez me enamoraba más, tu personalidad, tus bromas, tu locura.

Eres mi loco preferido, el único.

Llegaste a mi vida como el bálsamo que necesitaba, sorprendentemente yo no hubiera cedido, pero supiste ganarme y mira que lo has hecho perfectamente (jajaja), cometí grandes errores en mi pasado, sufrí, me costaron lagrimas, fuerzas, eh inclusive estuve a punto de darme por vencida, y es que te veía muy lejos.

Todo eso ahora hace que te vea como “mi precioso”.

Cariño, nunca lo olvides, eres de lo mejor en mi vida, te amo todido.

Amo que me procuras siempre, que te importa todo lo que me pase, todo lo que piense, haga o me hagan.

Amo la forma con que me tomas de la mano cuando me quieres decir algo.

Amo todas tus sorpresas, contigo nunca me aburro, siempre me sorprendes con algo diferente y fuera de lo normal.

Amo los gestos que haces cuando te enojas.

Amo como me miras cuando vengo caminando de lejos.

Amo tu buen gusto, tus ocurrencias, tus caprichos, tus casi microscopios defectos, tu TODO.

Agradezco tanto a Dios esta hermosa experiencia contigo, te imaginaras el amor que te tengo, aunque aquí entre nos, te estás quedando cortito mi amor.

Tu mirada me confirma todos los días que esta aventura se acabara hasta que uno de los dos no esté.

Sin que te des cuenta, o por lo menos eso pienso yo, haces que mis días pasen de simples y comunes a magníficos y divertidos.

Guarda tu corazón, porque de el mana la vida y de su abundancia habla la boca, yo siempre lo hare, de eso no debes tener duda, pero tú también procura cuidarlo.

Eres un hombre amable, caballeroso, sincero, sentimental (aunque a veces no quieras admitirlo), pero sobre todo amas a Dios con todo lo que tienes.

Eres mi orgullo, el segundo hombre a quien más admiro y amo.

Perdóname y tenme paciencia, recuerda que esta mujercita es un poco complicada.

Cuando me veas llorar no trates de calmarme, solo acércate, abrázame, escucha y dime que siempre estarás ahí para mí.

Dime las cosas como son, siempre prepárate para escucharme; cuando este mal, házmelo saber, apóyame hasta en la idea más extraña (a menos que quiera secuestrar a alguien, jajaja), ayúdame a entrar en razón, recuerda que esta mujercita es muy necia.

Pero sobre todas las cosas ámame sin límites y estoy muy segura de que lo harás.

Gracias por permitirme amarte y por aparecer en mi vida.

Te amo.

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